1 – CONOCE EL TAMAÑO DE TUS NEUMÁTICOS

Tiene sentido y será la primera pregunta que te hagan al entrar en la tienda. Si no estás seguro, basta con que eches un vistazo al flanco. Por ejemplo, si el código escrito en tu neumático actual es P205/60 R16, significa:

 

205 – Este número corresponde a la anchura de la banda de rodadura, es decir, la parte del neumático que está en contacto con la carretera.

60 – Este número representa la relación (en porcentaje) entre la parte superior del neumático (altura del flanco) y la anchura de la banda de rodadura (ancho de sección).

16 – Indica el diámetro interior de los neumáticos, en pulgadas

2 – CONOCE EL TIPO DE CARRETERAS POR LAS QUE CONDUCES

¿Conduces por vías urbanas? ¿Carreteras secundarias? ¿Autopistas? Si conduces mucho, no deberías dudar en adquirir neumáticos de alta calidad, sobre todo si tienes un vehículo compacto con tendencia a derrapar en condiciones meteorológicas adversas. Si solo conduces por ciudad, unos neumáticos de buena calidad y precio te servirán.

3 – MIRA LOS NEUMÁTICOS

Tómate tu tiempo para ir a una tienda. Podrás comparar la calidad de los neumáticos, en particular las ranuras, la flexibilidad y la rigidez lateral. Como recordatorio, las ranuras grandes proporcionan una mejor tracción en carreteras de invierno y facilitan el desplazamiento de aguanieve y nieve.

4 – HAZ LAS PREGUNTAS ADECUADAS

Un buen vendedor te hará las preguntas adecuadas para ofrecerte los mejores neumáticos. Te preguntará por el uso diario que haces de tu vehículo, pero también por tu kilometraje anual, tu lugar de residencia y, por supuesto, tu presupuesto.

5 – ELIGE ENTRE NEUMÁTICOS PARA NIEVE O HIELO

En general, los neumáticos para hielo se consideran de calidad superior, ya que proporcionan una excelente tracción sobre hielo y sobre nieve cuando no es el caso contrario.Si sueles conducir por autopista y carreteras más secas, los neumáticos de hielo serán los recomendados. Si conduces más por el centro de la ciudad, deberás adquirir neumáticos de nieve que te ayuden a deshacerte de los bancos de nieve.

6 – APRENDE SOBRE MANEJO Y FRENADO

Es la razón principal por la que deberías tener neumáticos de invierno. Por debajo de los 7 grados de temperatura, un neumático para todas las estaciones o un neumático de verano perderá tracción y flexibilidad y no ofrecerá una conducción tan segura como un neumático de invierno.

7 – COMPARA EL ETIQUETADO DE NEUMÁTICOS DE LA UE

Cuando vayas a una tienda, podrás comparar el etiquetado de neumáticos de la UE. Se trata de una clasificación de prestaciones que se implantó en la UE en 2012. Ofrece información sobre 3 factores:

- Eficiencia de combustible: la energía que se pierde cuando un neumático rueda se denomina resistencia a la rodadura. Cuanto menor sea la resistencia a la rodadura, más se tenderá a ahorrar combustible y a disminuir las emisiones de CO2

- Adherencia en mojado: proporciona información sobre el agarre del neumático en carreteras mojadas. Los neumáticos con un agarre excelente tienen distancias de frenado más cortas.

Ambos van de la A (mejor rendimiento) a la G (peor rendimiento).

- Niveles de ruido: corresponde al ruido exterior del neumático, expresado en decibelios

8 – INSISTE EN OBTENER VARIAS OFERTAS

Pide más de una oferta de neumáticos. Podrás elegir tus neumáticos de invierno entre las muchas propuestas que te haga el vendedor.

9 – EVITA MEZCLAR NEUMÁTICOS

Adquirir diferentes marcas de neumáticos para tu coche nunca es una buena opción. Puede afectar a tu conducción, provocar una mala maniobrabilidad y causar el desgaste prematuro de algunas piezas.

10 – ¡CÍÑETE AL PRESUPUESTO!

Es un aspecto importante en la elección de neumáticos. Tómate tu tiempo para comparar precios y calidades con el fin de conseguir los neumáticos que mejor se adapten a tu vehículo y, por supuesto, a tus necesidades.

A la hora de elegir tus neumáticos de invierno, tómate tu tiempo para hacer las preguntas adecuadas, obtén toda la información para tomar una decisión acertada.